Hasta que nos duelan las costillas

Javier Navarro-Soto Egea

11,90 

Me atrevería a decir que uno de los viajes principales que propone Hasta que nos duelan las costillas es un intento de pasar de la vergüenza de anunciarse —«o sea perdón por la interrupción / o sea perdón por la intensidad»— al encuentro de referencias a las que aferrarse. Es el paso de una infancia marcada por la ausencia de conceptos y de relaciones a la adolescencia plagada de toda una mitología cultural. Ahí aparece todo lo pop: nuestras cantantes favoritas de la adolescencia, las series de instituto, los coming of age.
—Del prólogo de Juanpe Sánchez López

 

Hasta que nos duelan las costillas es un poemario —o mejor, un poema en plano secuencia de ochenta páginas— que irrumpe en la tradición de las obras de maduración personal en forma de Notre-Dame ardiendo. Escrito en el verano de 2020, Javier Navarro-Soto Egea se vacía en los últimos años de su adolescencia para intentar conseguir la foto fija de ese momento clave de su vida. Sus versos son indomables y anárquicos, como los de un joven apesadumbrado que escribe en su loco y triste diario sus confesiones más íntimas y patéticas, sus miedos y fobias, pero también los destellos de felicidad explosiva y los momentos de exaltación de la amistad en una noche de verano bañada con vodka barato. Hay en este poemario ese sentimiento de arder al ritmo de una canción petarda, de no poder parar de bailar, mientras se mira de reojo y con cierta melancolía cómo se está plantando la semilla de lo que algún día serás como adulto, una edad inevitable a la que ir, pero que quieres evitar a toda costa.

Javier Navarro-Soto Egea es la voz de todos los que jugábamos en las plazas, de los que nos encerrábamos en casa con la game boy, de los que ahora vemos Paquita Salas con nostalgia y escuchamos música de Lorde con la luz apagada para que no nos vean llorar. Su poemario es un grito para todos los adolescentes que buscan su sitio en el mundo, y para los que lo buscamos cuando lo éramos y no lo encontramos.

 

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Marca:Cicely Editorial

Descripción

Fotografía del poeta Javier Navarro-Soto Egea
Fotografía cortesía de Susana López Romero.

Javier Navarro-Soto Egea (Lorca, Murcia, 2001) es el autor de Hasta que nos duelan las costillas, un poemario que es un canto melancólico a la adolescencia más afectada y confusa.

Estudió Psicología en la Universidad de Granada y allí estudia ahora Literaturas Comparadas.

Hasta que nos duelan las costillas es su primer poemario. No obstante, algunos de sus primeros versos se publicaron en las antologías Cuando dejó de llover: 50 poéticas recién cortadas (Sloper, 2021) y en Ladrido (Premios Ucopoética/ Bandaàparte, 2022), destacándolo como una de las nuevas voces de la generación Z a seguir.

Entre otros hechos interesantes en la biografía de Javier, destacamos tres. El primero que fue invitado a recitar en la Mesa Redonda de Poesía del Círculo de Bellas Artes de Madrid en mayo de 2024. El segundo, que participó en El Día Mundial de la Poesía 2024 en Granada, dentro del programa UNESCO Cities of Literature. Por último, el tercero, que es uno de los cofundadores de Oficina POTA ROSA. Este es un encuentro en Granada dedicado a la hibridación de otras disciplinas artísticas con la literatura y la poesía.

Javier es un lector y escritor voraz. Quedó finalista de los certámenes XIII Premio de Novela Jordi Sierra i Fabra y del I Premio de Poesía Letraversal.

Información adicional

Peso0,200 g
Dimensiones12 × 21 × 0,5 cm
Autor

Javier Navarro-Soto Egea

Colección

Flores en el balcón

Número dentro de la colección

2

ISBN

978-84-126483-3-1

Formato

Rústica con solapas

Número de páginas

86

Fecha publicación

Marzo 2023

Tipo de edición

Libro físico

Código THEMA

DCC: Poesía moderna y contemporánea

Marca

Cicely Editorial

4 valoraciones en Hasta que nos duelan las costillas

  1. 5 de 5

    Anónimo

    “¿acaso no es eso ser adolescente después de todo? / ser consciente de que eres mediocre y de que no tienes apenas / posibilidad de ganar”

  2. 5 de 5

    Anónimo

    mientras lo leía me sentía eufórica y triste a la vez!!!

  3. 5 de 5

    Júlia (Propietario verificado)

    estoy completamente desbordada, abrumada, fascinada, feliz y también algo triste pero sobre todo estoy como cuando corres a abrazar a tu mejor amiga después de no haberla visto en todas las vacaciones de verano porque de repente te sientes como en casa y te sientes entendida. este libro es la confirmación de todo lo que mi cerebro ha centrifugado alguna vez y no ha sido capaz de decir, incluso ahora, con 26, ay javi, me siento igual pero leerte me hace sentir que bueno, somos así y así seremos y vivir en una ficción constante y adolescente y no superarla nunca quizá sea nuestra forma de supervivencia, nuestra notre dame tan quemada pero viva, nuestra forma de mantenernos desquiciadas, tristes, alegres, uf. no sé, creo que nada de lo que escriba va a poder expresar lo que he sentido con todo el poemario, poema, libro, manuscrito, texto, lo que tú quieras que sea, pero desde luego es una maravilla si eres una chica chico anclado en la adolescencia y que no entiende la vida adulta pero aún así la pasa como todos esperando la muerte sin entender ninguna de las dos cosas y esperando recuperar esa juventud en algún momento viviendo otra vez alguna primera vez. eso es este libro, volver a todas las primeras veces en compañía. brutal. gracias de verdad porque no sabía lo mucho que necesitaba sentirme así y sentir que no estamos solas ni solos en esta idea de la eterna adolescencia y de no entender nada de no ser nada y a pesar de todo seguir existiendo. gracias gracias gracias, ha sido un viaje increíble y me he quedado sin lápiz de tanto subrayar, dibujar y responder estas letras. porfa, LEEDLO!!! 💗💗💗💗💗💗🦋🦋🦋🦋🦋

  4. 5 de 5

    Paula

    Javi, que yo sin conocerle de nada le llamo siempre Javi gracias a las redes sociales y esas maravillas que te hacen sentir cerca de las personas sin conocerlas, ha escrito un poemalibropoemario interesantísimo, como una canción larga adolescente que escucharías en bucle cada vez que la vida te pasase por delante sin esperártelo.
    Javi, que yo sin conocerle de nada le llamo Javi gracias a este libro que hace que te sientas cerca de él si conocerle, ha dicho que del dolor se puede sacar algo, que quizá deberíamos sacar algo para sentir que no es un dolor tan vacío, tan absurdo, tan innecesario.
    Hasta que nos duelan las costillas es todas las series, películas, música que nos hacen sentir jóvenes y a la vez viejos. Es una comparación constante del pasado, el presente, el futuro, la vida, la muerte, la infancia, la adolescencia, la nada, el ahora, los adultos, los sueños, las preguntas y los deseos sin respuesta.
    Yo sé que si viviera en eeuu y tuviera una taquilla, y fuera una nerd, y fuera ahora una niña, una adolescente, tendría forrada la taquilla con este poema largo, con imágenes de Notre Dame ardiendo y todas nosotras dentro bailando, gritando y cantando a gritos mil cosas sin sentido o con demasiado sentido.


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